Paranoyas célebres.

sábado, 9 de enero de 2016

Reflexiones de las 4 A.M.

Anoche, estuve leyendo e indignándome con unos comentarios hacía una conocida mía, así que mi cerebro dejó de preocuparse por dormir y comenzó a cavilar un post para el blog. El post de año nuevo, faltaría más. Probablemente es la primera vez que es la indignación lo que me lleva a escribir pues habitualmente son otros sentimientos los que se convierten en mis musas.

Estimados hombres del mundo:

Tengo que deciros, en nombre de todas las mujeres que comparten mi opinión (que no son pocas), que estamos cansadas de que penséis que nuestra vida gira en torno a vosotros.

Noticias de última hora: no nos maquillamos para engañaros ni para que penséis X o Y de nosotras. No nos maquillamos para gustaros más a vosotros. Las que lo hacemos, es porque nos gusta, porque nos entretiene o simplemente porque sí. No necesitamos que nos digáis que no deberíamos maquillarnos porque a vosotros os gustamos naturales. No necesitamos que nos digáis que deberíamos maquillarnos porque así estamos más femeninas. Cuando queramos vuestra opinión os la pediremos educadamente.
En esta misma línea, no subimos fotos con poca ropa o con un anorak para que nos digáis lo guarras o sosas que somos. Si las subimos es porque nos apetece, porque nos gusta como salimos o porque nos sale del mismísimo. Pero en el 90% de los casos no es para llamar vuestra atención y en el 10% que sí, qué más da. Esas chicas merecen el mismo respeto que tú, así que deja de insultarlas por hacer lo que les apetece en el momento y en el lugar que les apetece.
Del mismo modo, no jugamos a videojuegos, vemos X tipo de películas o hacemos Y tipo de cosas como reclamo de vuestra atención. Hacemos lo que hacemos porque nos divierte, porque nos gusta, porque son nuestros malditos hobbies y un entretenimiento libre para todos y todas. Así pues, no necesitamos un test cada vez que digamos que nos gusta Bioshock, Borderlands, Dota o League of Legends (por ejemplo). Estamos cansadas de que se juzgue todo lo que hacemos sólo porque se supone que es para “hombres”; por lo tanto, debemos hacerlo para impresionaros. Si tenéis ese pensamiento, respetuosamente os pido que os alejéis de mi vida. No le hacéis ningún bien.

Finalmente, en otro orden de cosas, pero en línea a lo comentado previamente. Quiero deciros, a todas las personas que me leáis ahora mismo que todas las mujeres son reales. Que no importa si tenemos curvas o somos tablas, si somos atléticas o escuálidas, si estamos depiladas o podemos hacernos trenzas con los pelos de las piernas. Que no importa si estamos teñidas u operadas, si estamos maquilladas o con pijama y un moño mal realizado. Que no importa como vistamos, si somos masculinas o femeninas. Que no importa si nacimos siendo mujeres u hombres, si somos de lugares o religiones diferentes. Que no importan ni nuestra profesión ni nuestros hobbies.
Mientras una de nosotras se sienta real sin importar todo lo demás, es una mujer. Así que dejad de juzgar y empezad a respetar. Os digo, de corazón, que no cuesta tanto.